La fibrilación auricular es una arritmia del corazón por la cual éste deja de latir regularmente, lo que puede originar el que la sangre quede estancada o remansada y, como consecuencia de ello, se produzcan los trombos. Por tanto, los pacientes que presentan o han presentado fibrilación auricular tienen un riesgo aumentado de producir trombos. Para intentar prevenir su formación, es necesario utilizar tratamientos que ayudarán a que la sangre circule mejor por nuestro corazón, venas y arterias. Es decir, un tratamiento anticoagulante. En este vídeo de la escuela de salud de la Comunidad de Madrid le explicamos las recomendaciones necesarias si toma tratamiento anticoagulante oral.
Recomendado para: Personas con fibrilación auricular
Palabras claves: sangrado, anticoagulante, arritmia